En esta página puede obtener un análisis detallado de una palabra o frase, producido utilizando la mejor tecnología de inteligencia artificial hasta la fecha:
Un asiento era un documento, que se incluía en algunos tratados de paz, por el cual un conjunto de comerciantes recibía el monopolio sobre una ruta comercial o producto.[1] Al igual que el estanco, el asiento era una licencia emitida por la corona española, pero en la cual un grupo de comerciantes y no individuos recibía el monopolio en una ruta comercial o producto.[2]
El significado general de asiento (del verbo español sentar, sentarse, y esto del latín sedere) en un contexto comercial significa "contrato, acuerdo comercial". En palabras de Georges Scelle, era "un término en el derecho público español que designa todos los contratos realizados con fines de utilidad pública ... entre el gobierno español y particulares".[3]
En muchos casos, un asiento en forma de financiación en el caso de economías de escala daba como fruto una compañía privilegiada (del italiano compagna), que era una compañía comercial cuyas actividades gozaban de la protección del Estado mediante un privilegio especial, que aunque no siempre conformaba un monopolio total, sí establecía en la mayoría un monopolio natural a manos del Estado. Su existencia se remonta al siglo XIV en Italia, destacando la Compañía de Génova, Compañía Británica de las Indias Orientales, la Compañía Neerlandesa de las Indias Occidentales o la Casa de Contratación de Indias en Sevilla.
Se incluyeron en algunos tratados de paz. El asiento más controversial fue el llamado "asiento de negros", aunque también existieron el "asiento de tintes y colores" (más tarde transformado en estanco), entre otros.
En España destacaron especialmente los asientos otorgados a los genoveses (en continua confrontación con la Corona de Aragón).[4]